El 1 de julio del 2015, California se convirtió en el primer estado que prohíbe el uso de bolsas de plástico de usar y tirar. Varios condados y ciudades americanas ya tienen tales normativas en marcha, pero esta será la primera vez que un estado entero dé este importante paso ecológico. Las bolsas de plástico de usar y tirar raramente se reciclan, y la gran mayoría de ellas acaban en los vertederos o contaminando las vías de agua y los océanos.

Como parte de esta nueva ley, las tiendas tendrán que retirar todas las bolsas viejas de sus clientes para que puedan ser recicladas. El gobierno financiará además a las empresas que fabrican bolsas para que puedan modernizar sus fábricas y hacer bolsas de plástico más resistentes, que puedan ser utilizadas durante muchos años. Estas bolsas reutilizables deben contener un cierto porcentaje de material reciclado (alcanzando el 40% para el año 2020).

California es el estado mayor y más poblado de América, y a menudo ha marcado estándares nuevos en el área medioambiental que el resto del país ha seguido más tarde. Un ejemplo de ello fueron sus estrictas leyes que regulan las emisiones de los turismos y que al final fueron adoptadas por casi todo el país. Los ecologistas esperan que la prohibición de estas bolsas de un solo uso tenga un efecto similar en todo el país.